Nos levantamos a las 5:30 de la mañana para ir a las iglesias a ver a los monjes ortodoxos en la oración matutina. Cogimos nuestras linternas y nosotras además un pañuelo para cubrirnos la cabeza (que al final no nos hizo falta) y salimos del hotel. No había ni una sola luz, podíamos intuir por el ruido de las pisadas que para alguien más a parte de nosotros había comenzado el día.
Caminamos hasta Bet Maryam, allí nos recibieron con una sonrisa y enseguida nos concedieron un sitio en su pequeña asamblea, nos pusieron un bastón en las manos como el que llevan los sacerdotes y dio comienzo el ritual a la luz de unas velas.
Las mujeres se quedaban en otra parte de la sala, sólo podían oir detrás de unas cortinas que las impedían ver el ritual. A nosotras no nos pusieron ninguna pega por formar parte de aquello que nos parecía un lujo, un ritual ortodoxo dentro de las iglesias de Lalibela siendo los únicos turistas.
Al acabar la celebración las mujeres pasaban de una en una y el sacerdote las daba con fuerza en sus espaldas dobladas con una gran cruz, con este gesto se supone que las limpiaban de sus pecados (no vimos hacer esto con ningún hombre, por lo que se ve, no pecan).
Estuvimos hasta el final, nos despedimos de los sacerdotes devolviéndoles sus bastones a la vez que les dábamos las gracias.
Nos pusimos en marcha de vuelta a la capital. Teníamos 700 km por delante pero haríamos noche en Dessie (Lalibela-Dessie 300km). El día prometía ser aburrido, llevábamos varias horas de coche cuando de repente, en medio de la nada, vemos una gran multitud. Preguntamos al chofer qué era todo aquel gentío y nos dijo que era un funeral de alguien importante, porque iban vestidos con sus mejores galas.
Contrata el mejor seguro para tu viaje al mejor precio
Completa tu viaje con todas las actividades al mejor precio
Paramos y dejamos al chofer orillado en la carretera. Nosotros pasamos a formar parte de aquel tumulto de gente que no sabíamos de dónde venían ni a dónde iban.
Enseguida comenzó a correrse la voz de que había cuatro blancos formando parte de la procesión. Tardamos minutos en quitar el protagonismo al difunto. ¡¡¡La verdad es que fue impresionante!!!.
Todo el mundo quería acercarse a nosotros, las mujeres nos tocaban. Nosotras podíamos formar parte de los rituales a los que sólo estaba permitido que lo hiciesen los hombres: bailar y colocarnos a dos metros del difunto cuando a las mujeres se lo tienen prohibido.
Una experiencia que nunca olvidaremos. Duró tres horas cuando sólo bajamos a echar un vistazo.
Cuando volvimos al coche pensamos que el conductor nos echaría la bronca, pero qué va!, estaba sumido en un sueño profundo que creemos le hizo perder la noción del tiempo.
Pusimos marcha a Dessie, no nos iba a quedar otro remedio que conducir de noche, cosa que recomiendan no hacer en Etiopía.
Por fin llegamos a Dessie, era tarde y estábamos cansados, teníamos ganas de estirarnos sobre una cama después de tanto tiempo en el coche. Buscamos alojamiento, no recordamos el nombre o quizá no tenía.
Día 8 – Addis Abeba
Nos levantamos temprano. Teníamos 400km por delante para llegar a Addis, sería otro día largo y aburrido. Cuando llevábamos dos horas de camino pasamos por un pequeño pueblo donde había mercado y preguntamos al chófer si podíamos bajar. Nos dijo que sí pero que cuidado con las fotos porque eran musulmanes y podíamos molestarles.
El chófer se equivocó, la gente era superamable e incluso posaban para las fotos. Repartimos unos juguetes a los niños y esto hizo que tuviésemos nuestro propio club de fans.
Cada vez nos seguían más niños que se dirigían a nosotros llamándonos «faranji», la palabra con la que llaman ellos a los blancos, a lo cual, tú respondes «habisat», que quiere decir negro.
Llegamos a Addis Abeba. Nuestra ruta por el norte había acabado. Nos despedimos de nuestro chofer dandole una propinilla (400 birr), se había portado bien.
Esta noche nos alojamos en el Baro Hotel (115 birr. hab. doble).
Mañana comenzaría lo más deseado de este viaje, la ruta por el sur, que nos llevará a conocer las tribus del valle del Omo.
25 febrero, 2016 a las 15:49
Cada capítulo que leo me entusiasmo más con el relato y con el país. Habeis conseguido narrar una historia apasionante, apoyada en unas imágenes muy sugerentes. Sois una maravilla. (May)
25 febrero, 2016 a las 17:09
pues continuará. Muchísimas gracias May, eres un cielo.
29 febrero, 2016 a las 11:26
Que relato mas bien contado!!!
nosotros iremos si nada falla en Agosto 2016,y me surge la duda con el tema de la oración de los monjes ortodoxos.¿Esta oración la realizan todos los meses del año? ¿Todos los dias? ¿En que iglesias?
Un saludo, y felicitaros por este relato es geníal.
Leticia
1 marzo, 2016 a las 15:06
Muchísimas gracias por leernos Leticia. Yo diría que la oración es todos los días y es una gozada porque no hay turistas, nosotros estuvimos en Bet Maryam sobre las 5 de la mañana. Si necesitas cualquier cosa no dudes en preguntarnos, no obstante seguiremos publicando todo lo del sur, espero que te guste y te ayude a preparar tu viaje, que estoy segura te marcará.
2 marzo, 2016 a las 20:44
Las cervezas. Bodas,funerales… Siempre estáis en alguno
2 marzo, 2016 a las 21:45
Se hace lo que se puede. Jajajaja.
6 marzo, 2016 a las 12:22
Jajaaja "(No vimos hacer ésto con ningún hombre, se ve que no pecan)" En la medida de lo posible, nos reiremos del maldito machismo… Que los faranji y habisat se encuentren en un mercadillo perdido y se saluden y mezclen y posen me parece muy bonito y enriquecedor.
6 marzo, 2016 a las 15:10
Eso es, maldito machismo, muy dura la vida para las mujeres, y en unos sitios más que en otros. Gracias por leernos Paco.
15 marzo, 2016 a las 18:51
Las fotos estupendas como siempre. Y el relato.. jajaja no todo iba ser fiesta en bodas. Xao chicas hasta la siguiente etapa.
15 marzo, 2016 a las 19:35
Jajajaja, el funeral tambien fue una fiesta. Nos encantó la experiencia. Hasta lueguito.
23 marzo, 2018 a las 22:13
Hola!! voy a Etiopía en abril. Sabéis si la oración matutina en las iglesias de Lalibela son todas las mañanas? porque me encantaría estar presente en una de ellas. Saludos
24 marzo, 2018 a las 9:23
Hola Mario. Nosotras estuvimos en Etiopía en el año 2013 y entonces sí que era todos los días, espero que aún siga siendo así porque merece mucho la pena. Que disfrutes mucho de tu viaje. Un saludo