Luxemburgo no era un destino que nos atrajera de manera especial, pero no dudamos en incluirlo en el roadtrip que hicimos en furgo por Francia, Bélgica y Países Bajos. Era nuestra oportunidad, ya que estamos casi seguras de que no hubiéramos hecho un viaje en exclusiva para conocer este país.

No esperábamos gran cosa, pero realmente nos sorprendió. A pesar de ser el séptimo país más pequeño de Europa no son pocas las cosas que tiene para ver.

Datos prácticos para visitar Luxemburgo

Antes de citar qué lugares interesantes ver en Luxemburgo capital y alrededores, vamos a comentar algunos datos prácticos importantes para facilitar tu visita al ducado.

El transporte público es gratis en todo el país (a excepción de los trenes de primera clase), por lo que se puede llegar a los distintos lugares de interés que se quiera visitar de manera gratuita.

La capital de Luxemburgo dispone de wifi gratuito.

Las autopistas son gratis y están en estado impecable.

Curiosamente la gasolina es más barata que en sus países vecinos, Bélgica y Francia. La diferencia era de 0,60€, un buen ahorro para el bolsillo, así que no dudes en llenar el depósito antes de abandonar el país, si al igual que nosotros viajas en furgoneta.

Qué ver en Luxemburgo

Luxemburgo es un país muy pequeño, por lo que recorrerlo es muy fácil. Es totalmente factible hacer campo base en la ciudad de Luxemburgo, ya que cualquiera de sus puntos de interés no están a mas de 100 km del centro de la capital luxemburguesa.

Qué ver en Luxemburgo capital

Empezamos por su pequeña capital. Se puede visitar perfectamente en un día, además es muy fácil de recorrer y con un montón de cosas que ver, todas ellas muy cerca unas de otras. Aquí contamos todo lo que no te puedes perder en el centro histórico, aun así, recomendamos hacer un free tour en español para ampliar tu conocimiento sobre esta ciudad.

Casamatas del bock

La fortaleza luxemburguesa fue un ejemplo perfecto de arquitectura militar. Su mejor muestra son los casamatas, un complejo de 23 kilómetros de túneles y galerías subterráneas que datan de 1644 y que fueron usados como refugio antiaéreo durante la Segunda Guerra Mundial. Incluían 25 puestos de artillería, establos, almacenes, talleres, cocinas, panaderías, mataderos y cuarteles para 1200 soldados. Un pozo de 47 metros de profundidad abastecía la instalación de agua dulce.

Chemin de la Corniche

El Chemin de la Corniche es un paseo sobre una muralla del s.XVII construida por españoles y franceses. Desde allí tenemos una hermosa vista del valle de Alzette y de los antiguos edificios de Luxemburgo. Es considerado como el balcón más bonito de Europa. 

Barrio de Grund

Si quieres llegar al barrio más coqueto de Luxemburgo situado en la parte baja de la ciudad, tendrás que tomar el ascensor de Saint-Esprit o caminar por las sinuosas calles empedradas para llegar al Grund. Este barrio es uno de los más auténticos y encantadores de la ciudad. Algunos de sus edificios, como la abadía de Neumünster, figuran en la lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO.

Otro de sus encantos es que está rodeado por el río Alzette y es totalmente recomendable dar un agradable paseo a lo largo de su ribera. Con sus casitas de colores y sus puentes. En la calle Münster encontraremos además algunos bares y restaurantes.

Catedral de Notre Dame

La catedral de Notre Dame es uno de los edificios religiosos más importantes de Luxemburgo. Originalmente era una iglesia perteneciente a los jesuitas y unos cincuenta años después, la iglesia fue consagrada y elevada al rango de catedral por Pío IX en 1870. Es de estilo gótico con algunos elementos renacentistas. En la cripta se encuentran enterrados algunos miembros de la familia real luxemburguesa. La visita a este templo es totalmente gratuita.

Palacio Ducal

Uno de los edificios más emblemáticos que ver en Luxemburgo es el Palacio Ducal. Es un palacio renacentista que se construyó como ayuntamiento para la ciudad, pero se acabó convirtiendo en la residencia oficial del gran Duque y donde realiza la mayoría de sus obligaciones como cabeza del Estado del Gran Ducado. ¿Sabías que actualmente Luxemburgo es el único Gran Ducado del mundo?

Plaza Guillermo II

Esta plaza es el corazón del centro histórico de Luxemburgo. Allí se encuentra el ayuntamiento de la ciudad, un elegante edificio neoclásico, ubicado en un antiguo monasterio franciscano. 

La fachada principal da a la plaza más importante de la ciudad, la plaza Guillermo II, ha sido un punto de referencia para gran cantidad de eventos históricos de la ciudad de Luxemburgo.

Presidiendo la plaza verás una estatua ecuestre del rey Guillermo II, que da nombre a este lugar.

Dónde aparcar en Luxemburgo

Lo mejor para visitar Luxemburgo es dejar la furgoneta en el parking Glacis Square. Es gratuito los domingos y festivos. Desde aquí se puede coger el tranvía gratuitamente para llegar al centro en 5 minutos.

¿Qué vas a hacer en Luxemburgo?

Clervaux

A 66 kilómetros al norte del centro de la ciudad de Luxemburgo se encuentra Clervaux. Como sucede en la mayoría de las ciudades del país, todo se organiza en torno a un castillo. El Castillo de Clervaux se encuentra sobre una promontorio que domina un meandro del Río Clerve desde el siglo XIII, aunque su actual aspecto data del XV. Tuvo que ser restaurado tras la Batalla de las Ardenas. En su interior hay un museo dedicado a esta batalla (Entrada al museo 5€).

A los pies del castillo se esparce una ciudad con casitas tradicionales, algunos palacetes y edificios religiosos como la Iglesia de San Cosme y San Damián, construida entre 1910 y 1913 en estilo Neorrománico.

El otro punto de interés del lugar es la Abadía de San Mauricio de Clervaux (gratuita), un complejo de edificios de finales del siglo XIX que rinde homenaje a los estilos arquitectónicos medievales. Si tienes suerte, tu visita puede coincidir con los rezos cantados de los monjes.

Dónde aparcar en Clervaux

Existe un parking gratuito en la Plaza del Mercado y otro en la calle Klatzewee nº16. Frente a la abadía también hay aparcamiento gratuito.

Vianden

A 50 kilómetros al norte de Luxemburgo se encuentra Vianden. Asentado sobre un promontorio rocoso llama poderosamente la atención la que sin duda es la fortaleza más impresionante de Luxemburgo.

La historia del Castillo de Vianden se remonta nada más y nada menos que a mediados del siglo I, cuando los tréveros (pueblo galo que habitó el valle del río Mosela) construyeron una fortificación en este lugar, pero fue entre los siglos XI y XIV cuando dicha fortificación se fue ampliando. En el siglo XVI el castillo fue abandonado hasta que en 1820 la fortaleza se vendió y, su nuevo dueño, lo dejó en estado ruinoso. En 1977 fue cedido al estado, fue entonces cuando comenzaron las obras de restauración que devolverían al Castillo de Vianden su esplendor actual.

Desde donde mejor se disfruta de su ostentosidad es antes de llegar al pueblo por la carretera 322, en el 4 Rte de Diekirch.

Ya que hemos llegado hasta Vianden atraídas por su castillo no podemos dejar de ver otros atractivos como Ourbrücke, el puente de piedra sobre el río Our; la Iglesia gótica de los Trinitarios, construida a mediados del siglo XIII y junto a ella la Chapelle de la Sodalité, una pequeña capilla que data del siglo XVIII.

Dónde aparcar en Vianden

El aparcamiento tanto en el pueblo de Vianden como en el castillo es de pago, pero se puede estacionar de forma gratuita en el parking Larei, a 500 metros del centro del pueblo.

Diekirch

Diekirch es un pequeño pueblo situado a orillas del río Sauer que destaca por su iglesia de San Lorenzo del siglo XV. En su interior se pueden apreciar frescos del siglo XVI que muestran la vida del santo.

También se puede visitar el museo Nacional de Historia Militar que ofrece, además de artefactos históricos, una visión completa de la historia militar de Luxemburgo sobre la Segunda Guerra Mundial.

Dar un paseo por el río Sauer y por el centro histórico es recomendable, pero lo que realmente merece la pena es hacer una ruta por las cervecerías locales, ya que sin duda es lo más famoso de Diekirch.

Castillo Beaufort

En el este de Luxemburgo se encuentra el Castillo de Beaufort. El castillo comenzó siendo una pequeña fortaleza en el siglo XI. En el siglo XVIIl fue abandonado, y fue utilizado como cantera. En 1893 fue restaurado y cien años después pasó a ser propiedad del estado. En la actualidad consiste en las ruinas de una fortaleza medieval y un castillo renacentista adyacente.

Dónde aparcar en el castillo de Beaufort

Frente al castillo, al otro lado de la carretera hay un amplio parking gratuito.

Echternach

A orillas del río Sauer, que hace frontera entre Luxemburgo y Alemania, se localiza una pintoresca villa con una vieja abadía medieval, los restos de una villa romana y un lago, lo que hace que Echternach sea uno de los sitios más bonitos y con más historia de Luxemburgo.

Echternach es considerada la población más antigua del ducado de Luxemburgo, ya que nace en la Alta Edad Media, en concreto en el año 698, cuando San Willibrord de Northumbría, un monje inglés fundó una abadía que daría origen a la ciudad y que llegó a convertirse en uno de los monasterios más influyentes de la zona.

En el casco histórico de Echternach se puede disfrutar de su agradable y tranquilo ambiente mientras se pasea por La place du Marché, corazón de la villa, repleta de edificios históricos porticados y un crucero. Entre todos ellos destaca la fachada neogótica de los antiguos Juzgados, hoy Ayuntamiento de Echternach. Y sin duda, el edificio más llamativo es el de la antigua Lonja medieval, con arcos góticos y estatuas de santos adosadas en los muros.

Dónde aparcar en Echternach

Aparcamiento gratuito en el parking Bénédictins. Dispone de 5 plazas para autocaravanas. A diez minutos caminando al centro.

Aparcamiento de pago 0,50€/hora en el parking A Kack, parking Douane o parking Rue Comte Sigefroi.

Cascada Schiessentümpel

Este agradable paseo hasta la cascada Schiessentümpel transcurre por un camino perfectamente marcado durante 0,5 km entre un bosque de cuento. Sobre la cascada se eleva un puente de piedra arenisca construido en 1879, símbolo de la región de Mullerthal, la Pequeña Suiza de Luxemburgo.

Dónde aparcar en Schiessentümpel

Donde comienza la ruta hay un parking gratuito.

Cementerio de Hamm

Los cuerpos de 5000 soldados norteamericanos que murieron durante la Segunda Guerra Mundial y que nunca pudieron ser repatriados, descansan en este impactante rincón en medio de los bosques de las Ardenas, en el cementerio de Hamm.

Una de las tumbas más visitadas es la del legendario general George Patton, que a pesar de morir un año después de la guerra en un accidente de coche, siempre pidió ser enterrado junto a sus hombres.

Cementerio militar alemán de Sandweiler

A 1,5 km del campo santo de Hamm, en la aldea de Sandwieler, se encuentra otro cementerio, en esta ocasión alemán. En él reposan unos 10.913 jóvenes soldados alemanes que perdieron la vida en la batalla de las Ardenas, en la Segunda Guerra Mundial.

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